4 de febrero de 2009

El acosador del 16


En octubre del 2007 descubrí que yo no le gustaba a los hombres: los hombres sólo me acosaban. Que no podía gustarle a alguien sólo por gustarle, no: tenía que comportarse como un sicópata. Que había gente que podría considerarme una persona simpática y pasable, pero que los que no lo pensaban sencillamente se saltaban ocho pasos y procedían a perseguirme de manera patológica. Lo consigné aquí con mucho pesar.

En la secundaria no podía darme cuenta si le gustaba a alguien, así que pensaba que NO le gustaba a nadie. En la preparatoria ocurrió casi lo mismo. Al final de ella, sin embargo, fue cuando descubrí que no sólo le gustaba a alguien: que alguien me amaba. En silencio. A los 17, eso es como descubrir un cofre del tesoro debajo de un puente peatonal.

Mi relación con el sexo opuesto siempre ha sido extraña, dispar. Y extremosa. Un desierto árido que luego se sobrepobló. Una imagen primera, una impresión original de poco éxito con los hombres que luego se convirtió en esta extrañeza: uno que me jura que se mutilaría por mí, otro que jura que estamparía su coche en el primer árbol, otro que me marca al teléfono 67 veces el mismo día y manda mensajes cuando no le contesto y le importa bastante poco si le digo que tengo novio (inventado, por supuesto). Otro, como mi vecino del 16, que subió hace rato las escaleras corriendo y me tocó la reja y apenas si pudo hablar con la voz entrecortada por el esfuerzo.

Me dijo que fuéramos por un café. No le importó la hora que era, que yo venía cansada de trabajar, y que lo miraba con una mueca que podía ser muchas cosas, ninguna amistosa. Algo de miedo, repulsión, incomodidad, un poco de gracia. Pero miedo, sobre todo. Porque empezó a recitarme todos mis hábitos. Sabe a qué hora me levanto, a qué hora salgo de mi casa, hasta qué infame hora de la madrugada me duermo, cuándo me place cerrar las persianas y cómo estuvo encaramado en su ventana durante todo el rato que estuve colgando las cortinas de mi cuarto.

- Y pensaba: "yo te ayudo, yo te ayudo; asómate, por favor" -me dijo, con un nerviosismo que, lejos de ser tierno, sonaba enfermo. Y triste.

Como no acepté a nada, le dije que ya había cenado y que tenía mucho sueño, me invitó a comer... PALOMITAS DE CARAMELO. Es lo más arbitrario que me han invitado. Usualmente, la gente intenta comprarme con otras cosas, valiosas, por decir algo.

¿No somos unos idiotas, al estar infatuadillos (en mexicanismo: enculadillos) con alguien? Recuerdo, sí, no darme cuenta si le atraía a la gente cuando tenía 14 años -y muy seguramente, dado el caldo de hormonas y poca autoestima adolescente, no consideraba que fuera algo posible. Ahora es distinto, no porque atraiga a las personas por montones, sino porque adquirí (como el 97% de las mujeres al cumplir los 18) la habilidad de reconocer cuando tal hilaridad ocurre. Precisamente por eso es tan gracioso ver a la gente fingir, y por eso es tan gracioso prestarse a la fanfarria, y por eso es tan gracioso comportarse como una ilusa con los ojos vendados. Porque si te gusto, si te gusto, oh, y estás tratando de desviar mi atención... deja de preocuparte: ya lo sabía.

Si algo he aprendido en mi devenir amoroso es que nadie acepta una derrota. El manido recurso de "tengo novio" no sólo no es efectivo, sino que a veces es atrayente y, por lo tanto, doblemente perjudicial. Nadie, hombres o mujeres, considera la batalla perdida ante el conocimiento de que el objeto de nuestro afecto "ya está apartado". A lo más, aviva la batalla. Nos convierte en seres más perspicaces y encantadores.

Tengo un as bajo la manga, sin embargo.

42 comentarios:

Luis Alvaz dijo...

Espero que no lea tu blog. ¿No has pensado que quizá sea alguno de tus lectores asiduos?, y que se ha inventado una identidad, UN TROLL.

Je.

Saludos

Lilián dijo...

Lo dudo. Es sólo mi vecino. EL VECINO DEL 16. Mítico. No creo que sepa ni qué son los blogs. Me contó que estudia "piloto aviador" (quiere impresionarme, no me la trago, nomás no).

Lilián dijo...

Ash! Habia hecho un comentario y esta cosa causó error y ya no se publicó.

Creo que había dicho 3 cosas:
1. Te ofreció palomitas de caramelo y no aceptaste? En que estás pensando! Que más quieres de un hombre? Prestigio? Amor? dinero? estabilidad emocional? Sexo duro? Todo el mundo sabe que el éxito de las relaciones está en el caramelo!
2. Te está pidiendo a gritos que lo corrompas
3. No seas ingenua, todo el mundo sabe que una lesbiana guapa es doblemente atractiva para un adolescente. Hasta a ti te gusta Shane, no? Mejor dile algo repulsivo, como que eres sobrina de Elba Esther Gordillo y que te estas preparando para ser diputada o algo así.

O resígnate y usalo en tu beneficio para que te siga subiendo cubetas de agua. =P suerte.

P.D.: Sólo por si acaso... no olvides dejar tus papeles en orden eh. (Broma)

Garash dijo...

Creo que el ser lesbiana ya no espanta a nadie.

Luis Frost dijo...

nononononoNO!
va a espiarte más, con la esperanza de cachar algo de girl-on-girl action. o te invitará más seguido. o te propondrá un trio con la del quince. mala idea. mala.

salaverga dijo...

Lilian quieres ser mi novia?

Chilangelina dijo...

Siguiente post: De cómo ahora todos me conocen como la lesbiana del veintitantos.

Lilián dijo...

Ay Salaverga, eres un acosador. Una ya no puede ni decir: SEXO ENTRE MUJERES porque salen de las alcantarillas.


Oquei: no. Total.

Jair Trejo dijo...

Hmmm, mi estrategia para conquistarte iba a ser jadear en el teléfono y mandarte anónimos con letras recortadas del periódico.

Ahora fingiré desinterés.

Anónimo dijo...

Quizá ser patético es lo que muchos hombres interpretamos como "tierno", es solo que durante mucho tiempo nos hemos prohibido hablar derecho con las mujeres;
allí radica la cosa, yo creo que uno puede estar mas a gusto cuando encuentra a alguien a quien no le moleste cuando te tiras un pedo o le das bomobones con cucarachas.

Pero ya se sabe, uno realmente nunca sabe mucho.

Aarón dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Aarón dijo...

lesbiana juuu genial. Si te invito un sixto banquetero lo beberias conmigo?

El Rufián Melancólico dijo...

Lilians, a mi las lesbianas me ponen perspicaz y encantador, ¿cuándo te invito palomitas de caramelo?

Anónimo dijo...

Ja! Todo un "as bajo la manga"... coincido con Luis Frost en que es una muy mala idea =)

Anónimo dijo...

Qué complicación!! (esta ¿diplomacia? mexicana tan estorbosa) No funcionará simplemente...¿decírselo?

Y en casos extremos, a mí me resulta al 100 el "No me gusta tu olor" (y si es un punto débil en mujeres, mucho más en hombres!)

En fin...

Gabriela/undies dijo...

No le digas que eres lesbiana, dile que eres un transexual.

Momento, mejor no, eso empeoraría su acoso morboso.

RoCKoLiTa dijo...

No creo que eso funcione, lo vaa excitar más o te pedirá un trío con tu "novia", te dirá lo típico "no soy celoso, hacemos un trío?". TÍPICO! O peor áun te presente a una chava jajaja para que hagan el trío, claro. Lo he usado muchas veces y créeme que no funciona.

Don Rul dijo...

Las lesbianas y las palomitas de caramelo son tal vez la combinación más explosiva desde que Adán y Eva decidieron no usar condón y procrear al primer asesino de la historia. En fin, los stalkers no son tan malos. Pero por si las dudas no salgas sin tu gas mostaza.

Taquero Narcosatánico dijo...

Ni modod chamaca, atraes acosadores y esos ni con un "vete a la chingada, me das asco, me haces vomitar, ojalá te mueras, come caca"... ahí estará de nuevo.

Ni modo, tendrás que matarlo.

Taquero Narcosatánico dijo...

Qué mal redacté mi comment.

Taquero Narcosatánico dijo...

Ya se! dile que eres hemofílica, y cuando ponga cara de repulsión, golpeas sus partes nobles y corres como diablo.

Essex dijo...

Eso te pasa por andarle gritando su nombre a todo pulmón en horas de la madrugada y con las chelas en la cabeza. Así cualquiera cae.

Lilián dijo...

Y que me lo encuentro hace rato, mientras abría la puerta del edificio para ir al banco. Que se quita sus lentes oscuros y me dice HOOOOOLA, LILIÁN. Y yo sólo dije:

- Tengo mucha prisa. Me cierran el banco. Adiós.


Ughr.

Anónimo dijo...

¿es el mismo que te regaló cervezas, sin motivo alguno?

Lilián dijo...

Anónimo:

Pues no. El de las cervezas es del 23. Éste es EL VECINO DEL 16. Les digo: el puro pegue en mi edificio. Eso o jamás habían visto una mujer en su vida.

Rafael Merino Isunza dijo...

Apoyo la vuelta de tuerca al asunto con eso de que eres lesbiana y tienes NOVIA. Cuando lo hagas posteas su reacción: si se saca de onda o pone cara de perverso.

Hagamos apuestas por pura curiosidad antropológica.

Aarón dijo...

Asesinarlo, es buena opción.
Es tu karma atraer a puros dementes.

Octopus Queque dijo...

Amiguis, estás mal. Que le digas que eres lesbiana también le puede atraer, los hombres piensan que te pueden cambiar de bando cuando quieran. La respuesta efectiva es:

SOY HOMBRE.

De bando quizás te cambien. De genitales, que suelten la lana!

Por otra parte, cuando la mujer es la psicópata, cuidaaaado. Son como un dolor de culo horrible.

Vamos al covadonga un día destos! al menos un ratín (estúpida escuela en la tarde y levantarme temprano!)

Saluditooos

Lilián dijo...

ACTUALIZACIÓN:

No-ma-men. Primero: soy una idiota. No sé mentir. No soy de esas que dan un número falso cuando se lo piden, nomás NO puedo. La culpa me carcome. Así que el SICÓPATA del 16 me lo pidió y yo, a pesar de estar a punto de cambiar el último dígito, fui imbécil y se lo di.

Son las 2:05 am y acabo de recibir un mensaje. Transcribo:

a que vecinita linda aun despierta jijijiji yo igual pero ya me voy a dormir bueno que pases buenas noches lilian atte luis jorge


ENFERMO. Me vigila. Esto ya es inaguantable. RENUNCIO.

Anónimo dijo...

JAJAJA!! Esto cada vez se pone mejor...

Ahora, si hasta el momento no has contestado alguna de llamadas suya que verifique que SI es tu número, no tienes mucho problema, ya que no tiene manera de saber que recibiste el mensaje... registra su número como "indeseable del 16", y nunca, NUNCA le respondas una llamada =)

Diabla Región 4 dijo...

que controversia!! cuando te pidan tu número sólo cambia los dos últimos digitos del final por el número que sigue. Ejemplo si es 55124587 tu dices 55124588. No falla.
Estaba pensando en la estrategia que aplicó una amiga: tengo SIDA.
Claro, no le funcionó porque el wey ahora quería protegerla del mundo infame. Concuerdo con chilangelina, después todos te verán como bicho raro. También creo que tendrás que asesinarlo... o escurrirte siempre.

Anónimo dijo...

Supongo que este es el tema del que nos hablabas en la pedilla del cumple del Gerardo ayer... Un saludo, y recuerda los consejos de los treintones jajaja!!!

Plaqueta dijo...

Ya encontrará el blog, yo sé lo que te digo. Sólo esperemos que ya se le haya pasado el "enculamiento".

Lilián dijo...

Tocaya! Un galán me invitó palomitas de caramelo anoche. SEGURO sacó la idea de tu blog. ¿Ves? Eres famosa y probablemente ahora hasta impongas moda. A ese paso, coincido con Plaqueta, el acosador no tardará en encontrar tu blog.
Aguas!

Pelo dijo...

Yo digo que primero le aceptes las palomitas de caramelo y luego ya le dices que eres lesbiana.

Pero, ay, los hombres aman a las lesbianas.

FAIL.

Gabriela/undies dijo...

Ya dile tú de la existencia de este blog, se sentirá tan imbécil y avergonzado después de leer este post que no te volverá a hablar. Eso o planeará una venganza terrible por herir sus sentimientos.

I'm Violet Veela dijo...

¿Existen vecinos míticos que nos acosan secretamente?...bah, deben ser feos

Anónimo dijo...

Aish, que recurso tan gastado, además, como si no fuera verdad. Duh!

Lilián dijo...

Ja-ja. Una lectora anónima me quiere dar. Lo presiento.

Anónimo dijo...

Sería casi incesto chula. Te sorprendería ver lo mucho que nos parecemos. En lo físico y odiosa manera de ser. Saludos. Duh!

Anónimo dijo...

dedicate ha hacer otra cosa, eso de escribir no se te da... que bueno que te igues sintiendo amateur...

Miss B. dijo...

yo siempre digo eso, que soy lesbiana y sí, funciona, lo que temo es creermela. ¿Eso no puede pasar, cierto?