4 de marzo de 2009

No me satanices sólo porque doblo mi cuerpo obscenamente


Mis malos hábitos son constantes y la única lucha que sostengo a diario. Las horas que duermo y los horarios en que lo hago, la forma en la que me alimento, los circunloquios que le dedico al fino arte de trabajar, mi nula organización financiera. Soy un desastre, pero un desastre que piensa todo el tiempo en el cariz de su desorden, de su inhabilidad, de su poca concentración. No un desastre relajado, que se sienta con las piernas abiertas a comer nachos con queso m
ientras mira el partido, sino un desastre al que el DESASTRE le produce estrés. Un desastre paradójico.

(y mientras más escribo la palabra desastre, más pierde sentido)

Con el objeto de liberarme de mis disfuncionalidades, que encima de todo me trajeron dolores de espalda e insomnio, me decidí por una solución fácil:

YOGA.

Todos lo hacen, ¿no? Es lo de hoy. Hay devedés piratas afuera del metro Balderas y devedés originales de 35 pesos en el Sanborns, y todos parecen decirte: en mi redondez digital encontrarás el alivio para tus pesares.

Así que fui y tomé un curso intensivo de ocho horas. Me plegué en posiciones caprichosas, de nombres ridículos como “perro que mira al vacío” y “mono capuchino saltarín durante el deseo sexual”. No conocí a nadie interesante, salvo a una tipa que se acababa de hacer una liposucción, dijo que el yoga le ayudaría a combatir el estrés de “vivir en Estados Unidos y el DF alternadamente” y que se acababa de comprar el Wii Fit. Descubrí que no tengo flexibilidad, que la muñeca izquierda me duele cuando apoyo mi peso en ella y que los amigos te dan la espalda cuando quieres mejorar tu vida interior.

Ajá.

El Rufián Melancólico, ese hombre tan sabio con el que he co
mpartido innumerables charlas sobre cierta fauna social y nuestra repelencia a su modo de vida, enseguida me acusó de:

-respiren hondo-

CONDECHI GUANABÍ.

No, señores. NO. ¿Es demasiado increíble pensar que lo hice SÓLO por mi espalda? ¿Es exageradamente insensato concederme la razón y comprender que mi espalda, mi estrés, mi malformación craneal y mi respiración imperfecta
ameritaban unas cuantas horas de estar con los pies y los brazos estirados sobre un tapetito rosa chillón? ¿Qué significa la traición ideológica al lado de eso?

Durante la segunda sesión, mientras intentaba pararme de cabeza (con gran éxito, debo agregar), recibí un mensaje de voz del interfecto. Cuando salí y lo escuché, todas las venas de mi cuerpo recién introducido al mundo de la espiritualidaaaad se hincharon de sangre ardiente.

Me preguntó, ahora que llevaría una vida “mística”, si quería agua bendita recién traída del Tíbet que había en el Colegio de San Ildefonso.




17 comentarios:

Don Rul dijo...

Tú persevera; de algo te servirá. Por lo menos te hará más bien que estar todo el día pegada a los blós o que sacarte fotos con Carmelita Aristegui cuya credibilidad y objetividad son ya equiparables a las del Dr. Simi (pero sin la gracia).

Defeña Salerosa dijo...

Rufián va a brincar de gusto cuando compruebe que te hizo rabiar con ese mensaje.

No era tanta agua, eran como 200 ml.

Jeje.

El Rufián Melancólico dijo...

Lilians, claro que el agüita mística esa funciona! Yo me la traje (una vez despreciada) y la tengo junto al foco de la cocina y ha espantado a los malos espíritus de las moscas antibudistas que antes había ahí.
Oiga, y lo de engrosar las filas de la fauna condechi... mentira que yo la declarara a usté como tal (jejeje)... yo nomás hablo de hábitos y costumbres citadinos (jejeje)... y pos usté que se pone el saco. De todos modos, ese fin de semana de yoga creo que fue más divertido para mi que para ti. Saludines goeeeiiii

Taquero Narcosatánico dijo...

No eres condechi guanabí por el yoga... sino por un conjunto de características, como el que eres fresona con pretensiones.

No te creas, eres chida.

O sea.

La Rumu dijo...

Recuerdo que hasta te pregunté ¿Quieres ser condechiiiii?
Pero eso del agüita estuvo re bueno.
Te digo, que si quieres corregir postura y demás malformaciones, te agarres a chingadazos con un árbol y punto, quedas como nueva.

Miss B. dijo...

Yoga, ¡Wow! nunca digas nunca -dicen por ahí- sin embargo yo, en éste momento de mi vida, carezco de ganas, dinero y/o espalda imperfecta como para atreverme a tal cosa. Me voy por gimnasios de nenas y caminatas tomando café.

Te deseo suerte y más que nada éxito en tu nueva carrera hacia la mejoría de postura. Saludos.

«danito» dijo...

¿condechi guanabi? Yo creo que por el mero hecho de vivir en la condesa aplica el eufemismo.

Es decir, mencionen a algún condechi que no sea "condechi guanabi"

...

¿me etsplico?

=)

je! ntc Lilían, soy rete-hablador
=D

Lilián dijo...

¡Pero yo no vivo en la Condesa! ¡Ajá!

Essex dijo...

Con el rosa chillon salen 3 tapetes pa' depadelrock, y ya pa' que no me encochinen mis pisitos, snif.

Azul dijo...

Bueno, pero no mencionas si por lo menos está funcionando o no...

Hernández dijo...

Lilián:

Deja que los profesionales hagan su trabajo.

Dr. Konrad Sproll
Quiropráctico
Tel: 5662 2376

Eric Uribares dijo...

no entendí nada, que es eso de yoga? por qué hacías posiciones extrañas y te parabas de cabeza? te pagan por eso? o cómo?

chale, que confuso post¡¡

Vanessa C. dijo...

Lilían tú sigue allí, verás como si le ves el resultado, verás que pronto hasta levitas.

Karina dijo...

Lilián:

La contrología tiene el mismo efceto que la yoga, es un onda como pilates de piso; en en Centro Cultural Universitario apenas iniciaron el curso, bien bara bara el semestre ($$$ algo así como lo que pagarías por un mes en la Condechi, allá te rinde 5 meses).

Alina dijo...

yogui!

Plaqueta dijo...

¡Jojojo! Yo también tomé uno desos cursos. ¿Dónde lo estás tomando? Ya confiesa.

Pero el yoga no es lo mío. Me muero de pena haciendo esas cosas en público, y ME ESTRESO terriblemente cuando no me sale ni la posición del muerto panza arriba.

Falconi en cambio es fan, a veces se para de cabeza a mitad de las juntas en su oficina, válgame cristo rey. Él se la pasa diciendo que el yoga es la solución a TODOS los problemas del mundo, incluyendo la crisis y el desempleo y la mala suerte.

Ya entrados en el balconeo, el muy chairo pidió a Amazon un mat de HULE NATURAL ORGÁNICO goooooooei, y el condenado tapete APESTABA horriboemente, entonces toda su casa quedó oliendo a chairo mojado.

Y ya.

Uvé dijo...

Pues creo que nadie te satanizará por doblar tu cuerpo obscenamente. Nadie