22 de mayo de 2007

Mi última semana como una veinteañera rozagante

Y yo ayer quejándome por un hecho irrefutable, conocidísimo por todos, y ante el cual nadie nunca podrá hacer nada.

De veras que sí se siente algo diferente, no sé exactamente qué. Pero pronto, ¡pronto!, podré tomar alcohol en cualquier país que se me antoje.


¡Salucitaaa!

(les regalo una cara ebria, nomás por buena onda)

Tres niñitas ingenuas que no saben posar si no es con su consabida pose de drogasexoyrocanrol

Por cierto: acepto regalos por paquetería. No me incomoda ni me produce conflictos. Calculen la talla: caderonsona y de piernas larguiruchas. Aunque, por supuesto, todos sabemos que los mejores regalos del mundo siempre han sido un disco o un libro... Sorpréndanme.
Nah, sólo bromeo: de todos modos celebraré mi cumpleaños -el próximo sábado- de la manera más fantástica y maravillosa posible.
Ñaca ñaca.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

... bien, danos la direccion para los regalos, y claro para recoger la rebana de pastel

Anónimo dijo...

También puede ser el peor regalo del mundo (imagina a Osho y Ashlee Simpson).
De mi parte recibirás ambos (esos no obviamente, unos peores). A propósito dijiste que escribirías (tito.valles@hotmail.com) o me engañaste.

Anónimo dijo...

Pues como seguramente el 26 no estaré conectado, de una vez te deseo que tengas un gran día y que te lleguen muchos regalos de aquellos que tienen tu dirección =)

Yo la desconozco, así que te mandaré muchos besos y abrazos :P

Don Rul dijo...

¡Qué cagado, cumples años el mismo día que mi domadora!
Muchísimas felicidades, ojalá el cumpleaños traiga madurez y lucidez.

Nota: Mi compu se descompuso, por lo que no me enteró cuando alguien escribe algo en su bló. Eso me tiene sumamente angustiado. Espero regresar a la desequilibrante normalidad pronto.