2 de febrero de 2007

¡Intento de roboooo!

Estaba yo ayer en la madrugada viendo el Informativo 40 y pensando que exigiría en cuanto antes la renuncia de Hannia Novell por maldita prejuiciosa y desgraciada (la muy imbécil juzga negativamente la unión civil de las tamaulipecas Karina Almaguer y Karla López mediante el famoso pacto civil de solidaridad) (ya estaba dispuesta a reunir 187 firmas -que consistirían en 187 versiones de mi propia firma- para sacarla a patadas del canal) (que deje ser felices a las machorras, pues qué), cuando subrepticiamente se me ocurrió ir al baño.

Y he aquí que, estando allá, escuché que la ventana de mi cuarto se abría estruendosamente. No imaginé nada malo (a la una de la madrugada, y con los oídos ligeramente estropeados por cierta música que me dejé escuchar horas antes, es difícil carburar lo que se percibe) y seguí en lo mío. Luego sonó el timbre. Pensé que eran los departamentos de al lado. Seguí en lo mío. Luego sonó de nuevo. Me acerqué sigilosamente y pregunté quién era. Balbuceos inconexos del otro lado. Pregunté de nuevo.

- Ábreme por favor.

Y ante lo irrefutable de sus argumentos, abrí (aunque estaba descalza y con media cara enjabonada).

- Acaban de robarte.

Chaca chacán.

- Pero perseguí al ladrón y aquí tengo tu lap-top.

Luego sucedió una serie de hechos altamente peliculeros, como la llamada repentina al 060 y el diálogo policiaco que se suscitó:

- Acabo de sufrir un intento de robo.
- ¿Cómo lucía el sospechoso?
- Así y asado... Y el ladrón escapó por la calle de atrás.
- En un momento mandamos una unidad.

Lo cual sucedió en menos de cinco minutos y luego nos trepamos a la "unidad" y recorrimos la colonia y volvimos a encontrar al héroe que devolviome mi computadorsucha y me dijo que también había encontrado mi cartera tirada en el piso (entendible, porque además de mis credenciales, no tenía un peso) y patatín patatán, nunca se encontró al malhechor.


Diagrama de un robo furtivo



En resumen: perdí y recuperé mi herramienta de trabajo en menos tiempo del que tardo en lavarme los dientes (¡y pensar en las formas tan terribles en que mi carrera periodística/literaria hubiera quedado truncada!)

1 comentario:

sirako dijo...

y quien era el que te regresó tus cosas???


no será un intento de ligue?

caray que historia, que suerte!!!


saludotes lilián!!!