Me gusta pensar que soy una roca insensible, fuerte y valerosa que le hace frente a las visicitudes de la vida con indiferencia. Como alguien que podría perder a su hijo en la guerra de Afganistán y decir:
"Oh, el círculo de la vida".
Y luego cocinar algo.
Me gusta pensar que soy un hielo duro y fuerte que se mantiene erguido en la inmensidad del congelador, para luego caer en un vaso de whisky con agua mineral y pensar:
"Oh, al fin cumplo mi deber".
Me gusta pensar que soy como un roble adusto y viejo que se yergue en una avenida por la que nadie pasa, al que el otoño no le arranca las hojas ni el invierno le congela las ramas, al que los niños clavan papeles con chistes vulgares y en el que los amantes esculpen sus iniciales enmarcadas en un corazón. Un roble grande y seguro de sí mismo que alberga pajarillos con sus nidos en sus brazos, cacas de perro a sus pies, y lechita venenosa en sus entrañas.
Un roble que no se deja recortar ni ante la sierra más poderosa, ni ante la empresa de papel más grande de Latinoamérica.
Sí, me gusta pensar.
Afortunadamente, también pienso si en algún futuro cercano George Lucas se decidirá a filmar los Episodios VII, VIII y IX. Cuánto dolerá cargar 10 kilos de silicón en cada seno. Por qué los del canal 4 no se dan por vencidos de una buena vez. A qué edad habrá perdido Bill Gates su virginidad. Cosas así.
En realidad, soy como un frasquito hecho de vidrio de azúcar que se rompe a la menor provocación. Lloro muchísimo y por cualquier motivo. Sufro actualmente de una regresión a mi etapa anal, según Freud. Creo que es hora de superar esta fase... y comerme unos Doritos.
"Oh, el círculo de la vida".
Y luego cocinar algo.
Me gusta pensar que soy un hielo duro y fuerte que se mantiene erguido en la inmensidad del congelador, para luego caer en un vaso de whisky con agua mineral y pensar:
"Oh, al fin cumplo mi deber".
Me gusta pensar que soy como un roble adusto y viejo que se yergue en una avenida por la que nadie pasa, al que el otoño no le arranca las hojas ni el invierno le congela las ramas, al que los niños clavan papeles con chistes vulgares y en el que los amantes esculpen sus iniciales enmarcadas en un corazón. Un roble grande y seguro de sí mismo que alberga pajarillos con sus nidos en sus brazos, cacas de perro a sus pies, y lechita venenosa en sus entrañas.
Un roble que no se deja recortar ni ante la sierra más poderosa, ni ante la empresa de papel más grande de Latinoamérica.
Sí, me gusta pensar.
Afortunadamente, también pienso si en algún futuro cercano George Lucas se decidirá a filmar los Episodios VII, VIII y IX. Cuánto dolerá cargar 10 kilos de silicón en cada seno. Por qué los del canal 4 no se dan por vencidos de una buena vez. A qué edad habrá perdido Bill Gates su virginidad. Cosas así.
En realidad, soy como un frasquito hecho de vidrio de azúcar que se rompe a la menor provocación. Lloro muchísimo y por cualquier motivo. Sufro actualmente de una regresión a mi etapa anal, según Freud. Creo que es hora de superar esta fase... y comerme unos Doritos.
Oigan, ¿a qué edad perdieron su virginidad?
25 comentarios:
14
14
11
Ja ja ja. Qué graciosos.
E intrépidos.
ya grandecita (mucho) 23
CATORCE
Poff. Sabía que esa pregunta sería lo ÚNICO que interesaría a los CULTOS lectores (sin sarcasmo)
-suena Máquina Detectora de Sarcasmo a full-
¿Por qué no se clavan en la textura metafórica y altamente reflexiva del post en cuestión? ¡Vamos! ¡Clávense!
Lilián era un excelente texto y me lo tenías que amargar con un recurso innecesario y gratuito; cuando hablas de vacuidades (al parecer por miedo [no le saque] a seguir adentrándote en el tema) el distractor trivializa lo que realmente es importante y se pierde lo que sí vale.
Un beso.
Jaja, no entendía por qué los comentarios eran sólo números... hasta que volví al post y vi tu pequeña y arbitraria pregunta. Bah, te entiendo, yo también me encabronaría si después de semejante entrada tan deslumbrante los lectores sólo vienen a responder de manera borreguil tu pequeña pregunta y así airear sus intimidades sin tapujos y sin detenerse a pensar en lo profundo de tu escrito.
Si bien es cierto que tu bigote es tu característica más sensual, me gusta que te pienses como un roble adusto, le das cierto caché a tu pretensión de niña frívola, elusiva e inefable. Me explico: la roca y el hielo no están mal, pero la primera puede ser incómoda y pesada, y el hielo siempre se derrite y se acaba. El roble, en cambio, es noble y duradero. Sirve a los niños para jugar a la casita en el árbol, sirve a los pajaritos para hacer su nidito, sirve a las papeleras para hacer sus papelitos, sirve a los enamorados para hacer sus cositas, ¿cuántas parejas no han hecho el amor perdiéndose entre los robles adustos? ¡Carajo! ¿¿Nadie?? Pues no lo piensen más, tomen a su pareja y háganlo al lado de un roble adusto. Si no, que la frustración y la calentura insatisfecha los acompañen siempre. Lo siento, me perdí, vuelvo al punto central de mi comentario, que es el siguiente: los doritos sólo me gustan si los como en Chihuahua, acompañados de queso, jalapeños y granos de elote. Se llaman Dorinachos. (Babeo). Por lo demás, la entrada no es buena. Tampoco es mala. Digamos que es... lucidamente inocua, ancestralmente rijosa, cariñosamente tuya, suavemente... bésame... que quiero sentir tus labios, besándome otra vez, SUAVE...
Perdón si me extendí demasiado.
en ese caso, yo vivo en una continua regresion a la etapa anal o a cualquiera que sea la que me hace llorar a la menor provocacion...
Diría Liliana Felipe: «¡Ay Segismundo, cuánta vanidad!». Es decir, no todas las respuestas las contesta Segismundo; sin embargo... ¿A qué edad perdió su virginidad Segismundo?, ¿o George Lucas?...
¿Acaso son célibes?
¿Acaso Lucas la perdió poco antes de escribir el Episodio 1 y por eso inventó a Jar Jar Binks?
Está bien, me retractó, Segismundo tiene soluciones para todo, aun cuando el orgasmo clitoriano se le escape de la mano.
Saludos
¿Antonio de Valdes usa peluquin?...bueh, yo también me pregunto eso
Yo en cambio soy una piedra en el rio.
¿La recesion? bah! ¿2200 plazas menos donde trabajo? blah! ¿Me van a embargar? bah!
Y aqui sigo.
28, y eso que tengo 23.
A LOS VEINTIDÓS (en maýusculas)
el ver tantas respuestas con número me confunde y ya no sé si entendí el post
lo que dice es: a veces me azoto, pero una parte de mi cerebro también es liviana y es la que me salva de creerme roca / hielo / roble... pero ni mi lado trivial me vuelve insensible, ni mi lado insensible me absorbe hasta asfixiarme...
(ejem, si me estoy equivocando, creo que esto es una muestra de lo que Eco llama sobreinterpretación)
lo verdaderamente importante es que yo perdí mi virginidad a los 22 y que también encuentro la alegría en una bolsa de Doritos
buen texto, me gustó, clap clap
"Me gusta pensar que soy un hielo duro y fuerte que se mantiene erguido en la inmensidad del congelador, para luego caer en un vaso de whisky con agua mineral y pensar:
'Oh, al fin cumplo mi deber'"
Eso me recordó la película de Woody Allen "Everything You Always Wanted To Know About Sex (But Were Afraid To Ask)", cuando él era un esperma y estaban a punto de ser eyaculados.
PD.Que hueva los aduladores baratos, "entrada deslumbrante" admite Lilián que esa frase te pareció una guarrada.
Venga anónimo, ¿dónde está ese humor ligero? Hay que ejercitar más la reposada ironía y sacar más seguido a pasear al bien amado sarcasmo. Venga hombre, no te asfixies entre guarradas inanes, tienes un talento innegable para traernos a la memoria imágenes de antiguas películas (uff, eres grande) pero vaya, hay que decir que tu post data parece más bien una proyección extraña de tu GRAN SENSIBILIDAD, que todos admiramos, qué va, pero vamos, te recomiendo una cosa: no es bueno tener piel de seda ante comentarios que NO VAN dirigidos a ti. En fin... sigue por el buen camino hijo, te doy mi bendición y quiero que sepas -imagina a una madre que se dirige a su hijo más palurdo- que si te esfuerzas MUCHO tus escritos también serán deslumbrantes algún día y tendrás aduladores baratos al por mayor. Guarrada o no, mejor cuéntanos a qué edad perdiste la virginidad y ya no te sofoques tanto mijo.
Haré algo tremendamente frívolo sólo porque me encuentro en estado inconveniente:
NADIE entendió el post.
Gracias.
Explicación:
Me gusta pensar que soy grande, porque pensarlo no necesariamente es serlo, sobre todo cuando lo pensamos con gusto. Porque el gusto proviene de que no lo somos, y lo anhelamos.
Uno puede pensar tanto de sí como piensa sobre otros asuntos insulsos y vacuos. Tiene el mismo peso y la misma validez. Y, casi diría, la misma probabilidad de ocurrir.
yo le propongo aparte de los doritos que pase a la etapa oral, es más divertida
nadie me dijo que era un examen de análisis del discurso, je.
aunque bueno, no, la verdad no lo entendí muy bien; sin embargo, también pensé en que el fondo del asunto no era de mi incumbencia, así que sólo me referí a trivialidades.
en realidad yo llegué al otro blog que tienes al estar buscando información al respecto de El Tañido de una Flauta de Sergio Pitol... por cierto, tu otro blog está interesante también, aunque tiene un rato que no lo actualizas, aparentemente.
Saludos
Uh, novelaza la de Pitol. Sí, mi querido Luis, no te apures por no discurir las claves semiológicas de mi textito ridículo. No era para eso.
Sniff, ya casi no actualizo Mis Textos Serios. Prontamente subiré algunos cuentos recientes, manténganse sintonizados.
"por lo demás correspondo a tus teorías..."♪♪♪ amo a Liliana Felipe. Suelo ser un rumiante y adoro responder con un mugido a las preguntas que no entiendo. No por eso doy leche. Quisera pensar más, pero tengo que ir a masturbarme pensando en el negro judío... ahora me vas a tener que conseguir uno.
está bien que nadie te entienda: significa que estás muy adelantada para tu tiempo (eso te lo enseñan en el curso "cómo ser bloguero posmoderno")
Si entendí el post, pero no la explicación.
O sea, quién te entiende?
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