¡No intenten detenerme!
Un nuevo estilo de vida (uno sin muelas supernumerarias y empleos castrantes de 9 a 7) merece un cambio de imagen total.
Mañana... -chaca chacán- me cortaré el pelo.
(bueno: no es la gran cosa, pero tampoco me iba a rapar, oxigenar la cabeza, operarme la nariz y hacerme un tatuaje en la frente).
No, no intenten disuadirme. Para asegurarme de ello, deshabilitaré los comentarios.
¡Uoah!