17 de abril de 2007

Ñáñaras y otros sentimientos ambiguos e impronunciables

Luego de una pausa de diez días, uno se sienta frente a la computadora y piensa: "Chale, he perdido mi encanto".

Pero luego dice: "Bah, como si alguna vez lo tuviera".

Y luego piensa: "Nel, nel, acá la chingonería soy yo".

Y luego sobreviene harta confusión y sentimientos bipolares, oscilatorios: de la egolatría más insultante hasta la humildad más sumisa.

Por tal razón, su servilleta mejor no piensa nada y en lugar de eso escribe un resumen semi-detallado de sus vacaciones de Semana Santa:

Anduve aquí:


Polotitlán de la Ilustración: lugar de los Polo. Lugar preferido de Polo-Polo. Verídico.
Gran composición fotográfica que muestra, sin tapujos ni rodeos, mi nula capacidad fotográfica.

Donde hubo luna llena fenomenal y mis poderes lobinos salieron a flote:

En el fondo sí es una luna llena, nomás que en la foto está toda timidota


Luego estuve en el Defectuoso, donde vi al mismísimo Sergio Sendel:


Juro que en persona está más guapo. No muy alto y medio calvo. Muy mamey. Pero guapo.

También llegué de improviso a Ciudad Universitaria y vi una filotota afuera de un auditorio y cuando acerqueme a preguntar cuál era la onda, resulta que por ahí andaba el respetabilísimo Giovanni Sartori.
Pero no entré.


Claramente no logré sacar una fotografía del maestro Sartori, pero acá les tengo un cielo mamón que tomé en el camino.

Sin embargo, puedo decir que estuve a unos metros del señor Sartori... separada por algunos centímetros de concreto y algunos centenares de personas. Pero cerca al fin y al cabo.

Otro hecho interesantísimo es que nos subimos al Pumabús y anduvimos dando vueltas por el circuito a tontas y locas, con el objetivo de reclutar Portentos Masculinos. Uno cumplió el requisito y... se bajó por el estadio.
(Excelsa Aventura)

De esos viajes no hay fotografías que atestigüen mis declaraciones porque la cámara permaneció sepultada en lo hondo de mi mochila durante el viaje entero... Curiosidades de la vida.

El jueves fui a ver a Muse. Banda perfecta, sin error, harto potente, lloras nomás de verlos. Vi otras celebridades, como Amanda de Telehit (no muy alta y flaquísima), al tal Fox de Conservatorio (chaparrísimo, me llega al hombro) y a un actor del trece, de cuyo nombre no me acuerdo, y que tiene cara de sidoso. A la salida tembló y ni me di cuenta.

Luego estuve por aquí:











Luego regresé al mundo real y me sacaron de una clase, ¿qué tal?

Texto absurdo galardonado con el premio "Regreso triunfal más absurdo y aburrido en un blog de quinta" en su edición 2007




Actualización: El lector más fiel de este cuchitril, el apreciado Raúl g.n., me pregunta qué carajos hacía su servilleta en Polotitlán de la Ilustración. La respuesta es harto simple: es MI terruño primigenio. Ahí crecí, aunque ni nací ni me he reproducido, pero probablemente allá sean enterrados o incinerados mis restos. Uno tiene que pensar a futuro, digo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Estuviste en el DF y no avisaste? Te podría haber invitado unas chelas...

Ni hablar, ya será para otra ocasión...

Don Rul dijo...

Lilliancita:
Celebro como ninguno tu triufal regreso.
Creo adivinar en esa inefable plaza colorada la heroica población de Polotitlán. ¿Qué carajos hacías ahí? Hace unos meses filmé ahí memorable comercial. Anexo sentidísmo link:
http://www.youtube.com/watch?v=fIduT1dya5M
Enigüey no ande posteando esas fotografías que por ahí andamos muchos fans ávidos de imágenes para documentar nuestra perversísima admiración por su persona.
Qué bueno que estás de regreso. La red apesta sin ti (contigo también, pero está más chida).

Don Rul dijo...

No manches. Mándame un mail y platícame cómo es que te criaste en Polo. Unos primos tienen un rancho por ahí y vamos harto frecuente a Polotitlán a comprar carne y demás viandas. Tanto me gusta el lugar que hicimos ahí el majestuoso spot para TD que antes te mencioné.
Si mi abuela estuviera leyendo esto, diría: “el mundo es un pañuelo”.
Agrego a la cita emocionadísimo: “y a nosotros nos tocó ser los mocos”.

Anónimo dijo...

Queridos Lilian y Raúl:

Polotitlán no existe. Díganme que no existe un lugar con ese nombre. Es una broma de Polo-Polo... ¿cierto?

Anónimo dijo...

Hacia mucho que no me había reído tanto. Monty Python and the Holy Grail es muy buena, ahora se la importancia de las golondrinas. Sobre todo si en una cuestión de vida o muerte te preguntan, "What is the airspeed velocity of an unladen swallow?". Necesito echarle ojo a otra película que me recomendaste Rosemary's Baby. Estoy comenzando a leer tu blog (todo lo mastico como buen rumiante, así que dame tiempo, además no se nada de blogs), sobra decir que hay talento y que el humor que tienes es cosa seria.

alma dijo...

hola:me presento, soy edna conocida en este mundo cibernetico como la chule y buscando fotos e info de Polotitlan me topé con tu blog y francamente es buenisisismo, felicidades...
y la verdad me interesa mucho el saber de Polotitlan y me orientaste bastante...espero ir pronto...
gracias y buen dia!