24 de enero de 2007

Estoy profundamente orgullosa de mi hermana

Porque ha puesto el nombre de la familia en alto. No, no siento vergüenza ni pena. Siento orgullo. Tanto orgullo...

Comparable solamente a los sentimientos que me invadieron el sábado pasado cuando, bebiendo relajadamente en cierto lugar, mi hermano me llamó por teléfono y me dijo estas sabias palabras:

- ¡Adivina con quién estoy shupaaaaando tranquilo!
- ¿Con el Papa?

Lo cual fue bellísimo.




En el minuto 2:06 mi hermana dice cosas muy inteligentes como "Ash, no me preguntes eso. Pregúntale a mi esposo que te puede contestar mejor". Y luego mi cuñado del alma remata diciendo: "Oh sí, en un lugar verde. Mucha vegetación".

ORGULLO. SÓLO PUEDO SENTIR ORGULLO.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Abusadilla tu hermana!!! Enseguida le pasó la bolita a su marido y evitó decir algo comprometedor... viva la agilidad mental ;)