23 de noviembre de 2008

Mi cerebro tiene algo mal

Simplemente, cada día se distancia más de lo que dice mi boca. Se ha vuelto tan perezoso y condescendiente que me permite decir una serie de dislates absurdos sin advertirme antes, y luego ahí me tiene: con la vergüenza propia de haber dicho una barrabasada y sin ningún argumento de defensa.

Por ejemplo, miro el menú de un restaurante y pienso mentalmente en el platillo de mi conveniencia, digamos, "pierna de ardilla frita". Pero cuando el mesero me trae mi orden, le comunico con toda amabilidad que yo no pedí algo tan asqueroso como, digamos, "pollo" sino "pierna de ardilla frita". Él insiste. Yo insisto. Lucha de poder.

Entonces, uno de los comensales me toca el hombro y me dice:

"No seas babosa. Pediste el pollo".

Entonces tengo que comerme el absurdo platillo.

O a veces estoy con mis familiares contándoles mis primorosas aventuras en la gran urbe, por ejemplo "comí una torta, ocho tacos y tres chescos". Y uno de ellos me interrumpe: "¿once tacos?". Porque en realidad dije: "comí una torta, ocho tacos y tres tacos". Y mi cerebro estúpido insiste en que lo dije bien, pero el idiota qué va a saber ahí encerrado entre líquido cefalorraquídeo y en la completa oscuridad.

O me la paso toda una tarde tratando de acordarme cuál es la capital de Escocia. Y hasta que tengo oportunidad de buscarlo por internet, apenas tecleo "Escocia" y viene como una luz hacia mí: Edimburgo. ¡Albricias!

(en este respecto TENGO que contar algo que me hizo reír mucho, de una forma totalmente mala onda y elitista. Mientras pensaba en lo de Escocia, le pregunté a alguien que aprecio mucho pero-cuya-identidad-no-revelaré cuál era la capital de tan bonito país. Su respuesta fue "¿Irlanda?". Oh, qué gracioso. Termina paréntesis).

O como la otra vez que estaba escribiendo algo muy elevado y culto, y no podía acordarme qué es lo que tienen las aceitunas dentro. Tuve que subir muchas escaleras para preguntarle a alguien que domina el tema, y antes de hablar, la palabra ANCHOAS vino a mí. O sea.

¿Qué le pasa a mi estúpido cerebro?


15 comentarios:

Octopus Queque dijo...

Mmmm te diría algo, pero mi cerebro ha estado en reposo mucho tiempo. Desde que está en un sindicato, ya no ha sido lo mismo. snif.

Saludillos, Lillian The Nerd. Soy Queque (mmm eso dice mi nick... [¿Los ves?])

anteopolis dijo...

Oxígeno. sip:
Un poco de glucógeno también, y una pizca de diazepam con etanol.

No es lindo?

n_n

Anónimo dijo...

sin duda es el efecto secundario del smog...

Chilangelina dijo...

No es tu cerebro, es tu boca.

Anónimo dijo...

Di que eres dislexica y asunto arreglado.

saludos
Mario

Plaqueta dijo...

Deberías tomar de esas pastillas con ácido glutámico, las que anuncian en la tele con comerciales de un oficinista que siempre está corriendo con un maletín, presenta cosas en Power Point y llega a casa y le cumple a su mujer. Seguro él no se equivoca con eso de los tacos, seguro, segurísimo.

El Agus dijo...

Una trepanación y lo averigüas: sencillito.

Emilio dijo...

Dejas de tomar un mes y ya, problema resuelto. Hace poco mi hermana, que hasta donde sé tampoco es disléxica, escribió en la lista del mandado pan blanco de la siguiente manera: ban planco!!! ja ja.... debe ser algo similar a lo tuyo.

Luis Alvaz dijo...

cosas similares pasan a menudo en mi cerebro; sin embargo, yo lo adjudico a innumerables traumas que he sufrido a lo largo de mi vida (menores claro), y también porque nunca he tenido una memoria brillante (a diferencia de Funes el memorioso). Quizá lo que me ha salvado de ser una persona sin recuerdos es que trato de ejercitar mi mente repasando información inútil a lo largo del día (v.g. capital de Letonia = Riga), y también someto a mi oído a mucha información sonora (¿recuerdas los sonidos que has escuchado desde que despertaste?... algo así).

Bueno, ya no me acuerdo de lo que iba a decir, supongo que no tenía importancia...

Saludos.

Anónimo dijo...

ah caray, yo creí que era algo normal, no? o somos varios anormales?

Unknown dijo...

Andas distraída, estarás enamorada?

Chorrocientosmil dijo...

chales, segun el DSM-IV si persiste tu problema por minimo 6 meses, si te causa severos problemas en tu ritmo de vida...debes consultar a tu médico
:P
jaja, es una afasia, pero tienes sintomas de varias de ellas
casi mi primer año de carrera trabajaba en un bar y dormia 3-4 horas diarias, asi que parecia yo un zombi incapaz de decir algo coherentemente, lo mio se llamaba afasia semantica porque le decia trapeador a la escoba, o decia azul en lugar de verde, y yo juraba que lo decía bien mientras los demás me daban zapes al pormayor para que reaccionara y cayera en cuenta de que lo decía mal...chale, es eso, o estas enamorada jeje(si, me copie de la firma de el nahual, y qué, demándame nahual!!!)

Lilián dijo...

Me gusta la explicación de Chorrocientosmil. Sobre todo porque el DSM-IV es una fuente MUY confiable, y de ella saqué la idea de que a los suicidas hay que dejarlos ser... y permitir que se suiciden, pues qué.

No, no es "enamoramiento". En tal caso, con lo enamoradiza que soy, ya me hubieran internado en una 'granja de salud' (eufemismo para manicomio) desde mis 14 años.

Anónimo dijo...

Lo que pasa con tu cerebro es sencillo, sigues enamorada de alguien que no te corresponde y que lo más seguro no vale la pena, el amor apendeja! Pero se que puedo hacerte olvidar tu dolor, al menos por un momento!!

Anónimo dijo...

Willkommen, bienvenue, welcome!

Hmmm... olvidé a donde...